Una mujer china vive para sí misma en silencio, celebrando la próspera Belle Epoque con canciones y bailes. La protagonista femenina no tiene ni una sola línea de diálogo en toda la película. Lo que me gusta de Jia Zhangke es que sus obras de cine chino son muy interesantes y algo que se siente muy diferente a las de cualquier otro cineasta en China. En muchos sentidos, utiliza enfoques extraños de la cámara digital, enfoques de los temas, la música, los personajes y el entorno. Esta película se siente como una declaración de su carrera, a la manera de un documental y de ficción, es una experiencia fascinante. Utilizando material de archivo y mezclando ficción no lineal y no ficción, Zhangke presenta una narrativa y una atmósfera melancólicas y vanguardistas que están llenas de presentaciones maravillosas y temas explorados. Presentando personajes, actuaciones, música y diálogos que se sienten realistas y casi como si estuvieras observando la vida diaria de un individuo y la naturaleza de los seres humanos. Zhao Tao continúa brillando con su actuación y lenguaje natural con cada escena en la que aparece, las elecciones de la banda sonora son interesantes y todo el escenario de ficción vs no ficción, si bien desanimará a muchos espectadores, lo encontré interesante y un gran experimento de una historia. Sin embargo, no sugiero esta como la primera película para ver para Jia Zhangke, pero digo que es increíble.